Tan sencilla y humilde como él mismo: “Yo que nacà desnudo y que nunca he tenido más que un surco de angustia y un sembrado de estrellas, pienso que si no hubiera caminos polvorosos no habrÃa poseÃdo ni una sola cosa en la tierra†(OR, p. 10). Sus obras poéticas fueron reunidas en una colección de dos tomos: Obras reunidas, I y II. La sección “Caminos del albaâ€, dedicada a D. Ernesto Galiano M., da inicio con “El romance del vendedor de cancionesâ€, que es un canto al campo, a las montañas y a la esperanza de los campesinos donde los frutos se vuelven música, rompiendo la mañana, cruzando rÃos y caminos hasta llegar a las casas del pueblo con frutas que son canciones y poemas: “¡Canciones maduras traigo, canciones recién cortadas!†(O.R. Nº 1, p. 15). En “Otoño†afloran los sentimientos, reflejando la ternura del poeta su sensibilidad vivida en el húmedo campo siempre acompañado por la voz de su progenitora. Las cosas sencillas entran en su negra vida como pájaros de luz, inyectando paz natural venida de la vegetación, de la que el poeta es una semilla más. “Y siento que los surcos de la tierra aguardan la semilla de mi carne†(p. 21). “Abeja en el sol†es un diminuto poema donde Óscar retrata a la reina, “corazón del veranoâ€, con su pluma, viendo esta flor alada, que es la abeja, dadora de miel, como una pequeña y adorable energÃa rÃtmica, sonora y vital que va por todos lados, trozo de sol que vuela, capaz de pulverizar a cualquiera con un simple asomo: “Si la tocase ahora quemarÃa mi mano†(p. 22). El “Poema de la fraternidad†es un eterno canto a los obreros, dueños de todo lo creado, pero quienes en la mayorÃa de los casos no sólo son explotados, sino que viven segregados, marginados y en una espantosa miseria. En el fondo de este mensaje solidario ruega y sueña con la hermandad de todos los humanos, compartiendo una vida en armonÃa, sin egoÃsmos, llena de verdadera amistad, alejada de secretos y traiciones. Un mundo de esperanza, abrigado de una vida mejor sin la plaga del hambre.
Solicitar PrestamoTan sencilla y humilde como él mismo: “Yo que nacà desnudo y que nunca he tenido más que un surco de angustia y un sembrado de estrellas, pienso que si no hubiera caminos polvorosos no habrÃa poseÃdo ni una sola cosa en la tierra†(OR, p. 10). Sus obras poéticas fueron reunidas en una colección de dos tomos: Obras reunidas, I y II. La sección “Caminos del albaâ€, dedicada a D. Ernesto Galiano M., da inicio con “El romance del vendedor de cancionesâ€, que es un canto al campo, a las montañas y a la esperanza de los campesinos donde los frutos se vuelven música, rompiendo la mañana, cruzando rÃos y caminos hasta llegar a las casas del pueblo con frutas que son canciones y poemas: “¡Canciones maduras traigo, canciones recién cortadas!†(O.R. Nº 1, p. 15). En “Otoño†afloran los sentimientos, reflejando la ternura del poeta su sensibilidad vivida en el húmedo campo siempre acompañado por la voz de su progenitora. Las cosas sencillas entran en su negra vida como pájaros de luz, inyectando paz natural venida de la vegetación, de la que el poeta es una semilla más. “Y siento que los surcos de la tierra aguardan la semilla de mi carne†(p. 21). “Abeja en el sol†es un diminuto poema donde Óscar retrata a la reina, “corazón del veranoâ€, con su pluma, viendo esta flor alada, que es la abeja, dadora de miel, como una pequeña y adorable energÃa rÃtmica, sonora y vital que va por todos lados, trozo de sol que vuela, capaz de pulverizar a cualquiera con un simple asomo: “Si la tocase ahora quemarÃa mi mano†(p. 22). El “Poema de la fraternidad†es un eterno canto a los obreros, dueños de todo lo creado, pero quienes en la mayorÃa de los casos no sólo son explotados, sino que viven segregados, marginados y en una espantosa miseria. En el fondo de este mensaje solidario ruega y sueña con la hermandad de todos los humanos, compartiendo una vida en armonÃa, sin egoÃsmos, llena de verdadera amistad, alejada de secretos y traiciones. Un mundo de esperanza, abrigado de una vida mejor sin la plaga del hambre.
Agregar un comentario